Abril 2021: Al rescate de cavidades inéditas de Abismo

 Abril 2021: Al rescate de cavidades inéditas de Abismo

 

Los archivos de Fernando Henche

Hacia 2013, cuando decidimos tomar la zona que tiene Abismo en el Alto Tajo, una de las primeras labores fue el rastreo y centralización de toda la documentación posible sobre cavidades y trabajos espeleológicos que pudieran afectar al área elegida.

Después de 8 años, todavía hay publicaciones que no hemos podido ver y no pocas cavidades que sabemos están seguro en la zona, pero no sabemos dónde, y otras que fueron exploradas en el pasado (están equipadas), pero no hemos visto documentación sobre ellas, quizá porque sus exploradores no dejaron nada escrito al respecto.

Un spit en la entrada de la sima de Zona V,
pero nada sabemos de quienes equiparon la sima...

La zona afecta a tres términos municipales, Peñalén, Villanueva de Alcorón y Zaorejas. La parte de Villanueva es la más pequeña, una cuña al norte de la carretera a Peñalén, y cuya prospección está muy avanzada ya.

Bien, entre la documentación inédita hay en el archivo de Abismo un buen puñado de fichas descriptivas, que incluyen datos, alguna fotografía y plano topográfico correspondientes a 31 cavidades de Villanueva y que fueron trabajadas entre los años 2000 y 2003.

Una de las fichas que elaboró Fernando Henche,
casi todas inéditas a fecha de hoy

Casi todo este material permanece inédito o fue publicado de forma incompleta, tratándose de trabajos coordinados por nuestro compañero Fernando Henche, quien dedicó grandes esfuerzos a ubicar, desobstruir, equipar, documentar y topografiar todas esas cavidades, en general humildes, pero no por eso carentes de interés.

Quede claro, y él personalmente insiste en ello, que son trabajos de grupo, de Abismo.

Prácticamente cualquier trabajo espeleológico se hace posible gracias a la participación de múltiples compañeros, habitualmente de un grupo, a veces de varios colectivos. La aportación de todos esos compañeros resulta valiosísima y yo diría que imprescindible, sin ellos no se podrían haber obtenido los datos y documentación necesaria para llegar a la publicación, que es lo que queda ahí para la posteridad.

Pero es importante también hacer constar que tras el producto final que se publica, sea catálogo, informe, topografía, etc., existe un trabajo añadido a la prospección, exploración, equipación...

Se trata de una labor de recopilación, puesta en claro de datos, elaboración de informes, escritos, memorias, tratamiento de datos topográficos y dibujo de los planos, maquetación de dibujos, gráficos, fotografías, búsqueda y mención de las bibliografías implicadas... y un buen puñado de quebraderos de cabeza, "persecuciones" a los compañeros que olvidaron informar de algo o pasar datos necesarios para completar el escrito, para conseguir finalmente un producto más o menos coherente que será el que quede disponible para todo el que quiera leer en un futuro.

Más o menos ese es el proceso, y los autores que firman la publicación final suelen ser los que, además de estar implicados también en las labores de campo, se encargaron de estos últimos trabajos, de generar el producto que será distribuido. Por decirlo de alguna manera, se difunde y publica el resultado del trabajo de muchos, trabajo muchas veces anónimo, pero la publicación a partir del trabajo de todos la generarán sólo unos pocos.

¿Por qué esta disertación?

Bueno, tenemos intención, tras tantos años, de recopilar toda esa información de las cavidades que documentó Fernando Henche, actualizarla y darla a conocer conjuntamente, es decir, publicar todo ese material inédito hasta ahora, y consideramos que ineludiblemente él debe ser el autor principal del producto final.

Es posible que Fernando se enfade conmigo, pues conocemos su carácter y su humildad, pero su nombre está en todos los informes y topografías, y fue quien invirtió más esfuerzos y tiempo en todos los trabajos y en redactar todo ese material... De no haber sido así, esa treintena de cavidades "no existirían".

 

Buscando las cavidades fichadas

Tras el rollo patatero anterior sobre cavidades inéditas, autorías de publicaciones y trabajos, etc., diremos que de esas cavidades inéditas hay un puñado que permanecen "perdidas".

¿Qué es eso de "cavidad perdida"?

Bueno, el que siga el blog de Abismo ya lo sabe, me refiero a cavidades que se exploraron, estudiaron y publicaron en el pasado, pero cuya localización es hoy desconocida.

No es raro, antaño no disponíamos de GPS y muchos territorios son fisonómicamente complejos, resulta muy difícil ubicar un punto con suficiente precisión como para poder volver al mismo.

Son numerosas las cavidades que se citan en los catálogos como "sin datos", y sorprende a veces encontrar referencias claras a cavidades localizadas un día, y que al día siguiente, cuando fueron a explorarlas, no hubo manera de encontrarlas.

Abismo en su antigua zona de exploración de Poveda de la Sierra tiene en sus archivos algunas de esas, y allí estarán, pero no pudimos dar con ellas en la segunda ocasión...

Y en la zona actual, son un buen puñado de simas del grupo Comando que sabemos están ahí, pero que hay que buscar por aproximación y rastreo sistemático y, claro, reexplorarlas porque una boca no resuelve la duda, podría ser otra distinta...


La sima C-12, otra de las "C" que exploró Comando en los años 90, hoy todavía perdida... aunque sabemos que está en la zona de Abismo en el Alto Tajo...


... y tenemos localizada una entrada que podría ser, y en la que se aprecia esa inscripción... Todavía no la hemos estudiado

La sima C-2, tres décadas perdida, creo que es un buen ejemplo, más tratándose de una sima de más de 100 m de profundidad y que ya en los 90 buscamos los grupos Seguntino y Abismo, sin éxito...

Bueno, pues volviendo a esas cavidades documentadas por Fernando, sí, hay unas cuantas que todavía no hemos localizado.

Hay varias causas posibles, porque para casi todas ellas existe una coordenada tomada con GPS. Cuando, en 2013, comencé a buscar las que estaban en la zona de Abismo (unas cuantas caían en ella), pensábamos que era pan comido, coordenadas UTM al GPS y a por las bocas... y tururú que allí no hay nada.

Rápidamente se plantea uno el tema del datum, será que el GPS utilizado tomó las coordenadas con otro. Nada, fácil, vamos a guardar las coordenadas con los distintos data posibles, digamos el ED50 (el más probable para la época) y el WGS84 que es esencialmente igual al actual ETRS89. Buscamos y en uno de los dos puntos, o su entorno cercano porque entonces no eran tan precisos los "bichos esos", estará la boca... efectivamente alguna aparece gracias a estas maniobras, pero otras "han desaparecido" inexplicablemente.

Tras múltiples rastreos y pesquisas, habiendo localizado unívocamente muchas de esas cuevas (muchas, gracias a que eran conocidas por algún amigo, que si no...), hemos comprobado que hay un error frecuente en las coordenadas, un error que no nos explicamos, y que tampoco entiende el propio Fernando que fue el que las tomó. Es muy frecuente un desplazamiento del punto real respecto al apuntado, en general oscila entre 150 y 250 m y habitualmente en un abanico de rumbos estrecho, hacia el noreste más o menos... pero en algún caso es mayor o se aleja de lo anterior, como si fuera aleatorio.

Inexplicable, ¿quizá algún tema de configuración de aquel GPS, un problema de antena o de pocos satélites capturados para la triangulación...?

Inexplicable, lo único que se nos ha ocurrido es seleccionar un área de probable presencia y "arrasarla metro a metro", pero en algún caso, ni aun así encontramos la cavidad...

Así que, para reubicar bien las cavidades, documentar sus bocas con mejores fotografías y de paso sentir la emoción de estar al lado de esos trabajos antiguos de Abismo, estamos buscándolas todas.

Por fortuna, como digo, contamos con la inestimable ayuda de amigos que conocen unas u otras, y que saben dónde están sin ayuda del GPS, o tienen los datos GPS actuales. Especialmente valiosa la ayuda y datos de Óscar Ibáñez, de Villanueva, que conoce muy bien el territorio y además le gusta zascandilear por allí viendo simas y lo que caiga (es de los míos).

Para otras, recurrimos a ese "entorno probable" y las indicaciones de Fernando para alcanzar las bocas. En algunos casos ayuda mucho y logramos encontrar la boca, pero otras veces, nones. Las pistas han cambiado, la vegetación es distinta, Fernando metía el coche por donde hoy nosotros no podemos ni andar... en fin, a zascandilear por ahí a ver si encontramos las que todavía no tenemos...

Y en esto estamos, y eso es lo que vamos a ir contando en este y próximos artículos del blog.

 

Abril 2021: Cuevas de la Cañada Ocecar y de los Lirios

Dos cavidades muy pequeñas, "sin importancia", alguna tratada en la web de Abismo y quizá en alguno de los boletines del Club, pero que no sabemos dónde están exactamente.

Como teóricamente están cerca, nos vamos para esa parte y bajamos por un camino siguiendo las indicaciones de la ficha, dejando el coche en el sitio estimado.

Las coordenadas que hay en la ficha para la primera se alejan bastante del punto dado en las indicaciones, y además situarían la boca en otra ladera... algo falla.

Sabemos que la cueva de la Cañada Ocecar se abre al pie de un roquedo, así que bajamos por el barranco revisando paredes similares a las de la fotografía en ambas laderas.

Esta es la ficha de la Cueva de la Cañada Ocecar


Y esta es la topografía, una reproducción digitalizada de la original de Fernando Henche, tal y como queremos darlas a conocer en un futuro.

Finalmente, ahí está, bajo una pared de unos 8 metros, y se ajusta perfectamente a la foto. Es ella sin duda.

Logramos localizar la entrada ahí, junto a una pared rocosa, asociada a esas fracturas en la roca

Puede apreciarse la entrada, estrecha, en la grieta sobre la roca caliza, en el centro de la imagen... bastante angosta y hoy casi tapada por sedimentos y restos

Tomamos fotografías y anotamos la información para rehacer las instrucciones para alcanzar la pequeña cueva, y nos dirigimos a la busca de otra cavidad no muy lejana, la Cueva de los Lirios.

Ocurre en este caso que las coordenadas proporcionadas para esta cavidad están incompletas, le falta una cifra a la latitud, con lo cual es difícil saber dónde se ubica realmente.

Se decide intentar seguir las indicaciones de la ficha dejando el coche a la distancia indicada, en una curva pronunciada. Subimos por la loma hacia el lugar estimado.

Previamente, como as en la manga, habíamos buscado aquellas coordenadas más acordes a las cifras de esa parte del territorio y marcamos dos puntos con la esperanza de que entre uno y otro pudiera estar, más o menos, la cavidad. Una de ellas se situaba en la parte de la loma que subimos, la otra más alejada a otro lado de un barranco.

Ascendemos por la cuerda durante aproximadamente 500 m, hasta alcanzar casi la cumbrera, pues la cueva debería estar arriba donde ya casi se hace llano.

Buscamos y rebuscamos por allí un poco aleatoriamente viendo sitios parecidos a la fotografía que tenemos, sitios con arbolado poco denso y presencia de gayuba, pero conscientes de que son 20 años transcurridos.


Reproducción de la única fotografía que tenemos de la entrada a la Cueva de los Lirios, tomada hace dos décadas, no tenemos original, sólo la imagen escaneada a partir de las fichas originales

Estamos por allí un buen rato, sin éxito, tan sólo la guarida de algún animal que ni en pintura es la cueva buscada, cuya boca se abre en vertical y luego prolonga en horizontal.


Evidentemente eso no es la cueva (parece una madriguera), pero tomamos notas como "posi" por si en un futuro....

Finalmente, algo decepcionados, nos volvemos al coche, habrá que replantear la búsqueda de esta cavidad, a la que volveremos en otra ocasión.

 

Resultado final: Lirios 1, nosotros 0.

 


Topografía de la cueva que buscamos. Aunque humilde, creemos que debe ser incorporada al catálogo provincial

Aunque no la encontramos, el paisaje es muy hermoso, pinares y pinares de pino laricio mezclados con abundantes robles, entre roqueditos, barranquillos y pequeñas cejas, y hay muchas plantitas que empiezan a florecer.


Y esta cosita es una planta, son flores (aunque parecen hongos), "teticas de doncella" es uno de sus nombres vernáculos

"Leche de gallina", aunque es de una especie propia del Sistema Ibérico

Una de mis preferidas y que es abundante en esas parameras, la "Verónica de Javalambre", tan humilde que si no está en flor, pasará desapercibida bajo nuestros pies

El resto del día lo dedicaríamos a "hacer turismo" por esos pinares, Villanueva, la sima de Alcorón, comernos el bocata en algún merendero perdido, en fin, disfrutar del campo en primavera.

F. Javier Rejos



Entrada destacada

Cambiamos el día de apertura de nuestro local al JUEVES!!

Os comunicamos que, a partir del 13 de febrero, nuestro local pasará a abrirse los jueves de 20:30 a 21:30 , en lugar de los martes como ve...