Primeros Trabajos del año en Tamajón (22-2-2014)


Tras convocar la primera salida de 2014 a la zona de Trabajo de Tamajón para continuar con los trabajos pendientes que aún nos quedan, tan solo nos presentamos cuatro voluntarios, Javier Rejos, Paco Cuesta, Rafa Coronado y Jesús Fdez. ...pasado y presente de Abismo, casualmente los anteriores y actuales coordinadores de zona... buen día para compartir historias.
Preparamos la comida y compramos el pan y bebida mientras pensábamos nuestro objetivo para el día, tenemos trabajo para elegir...

Al final nos decidimos por una de las posibilidades encontradas y apuntada por Javier Rejos en el año anterior en el camino hacia Almiruete cerca del arroyo de Valdelapuerta, aunque éste entorno ya se prospectó hace décadas parece ser que el agua nos sigue ayudando y dándonos pistas de donde debemos seguir insistiendo. La posibilidad 23 se encuentra en el fondo de una fisura de tres metros de profundidad situada en una torca muy sedimentada en forma de hundimiento donde aparentemente parecía difícil su desobstrucción por la falta de espacio, ya que la grieta tiene cinco metros de larga, pero tan solo medio metro de ancho.
 Posibilidad 23  (TA-49)

No estaba claro si el tiempo nos iba a acompañar porque lloviznaba con algún copo de nieve al llegar al aparcamiento, por suerte hacia viento y solo fueron algunas nubes de paso. Llevamos todo tipo de herramientas para la desobstrucción, el objetivo era limpiar el fondo de la grieta hasta al menos comprobar si merecía la pena la posibilidad.

                                                         Javi empezando a hurgar
El trabajo nos lo repartimos muy bien en cadena y relevándonos, el primero en tocar las piedras del fondo fue Javier mientras los demás nos mirábamos pensando que no iba a ser fácil profundizar hacia abajo, pero como prisas no teníamos solo era cuestión de paciencia, y de coordinar el azadón, la barra y el cubo atado a una cuerda con el que sacábamos los sedimentos y cuando uno se cansaba, ...o se ansiaba, daba paso al siguiente.

El grano hace el granero y el trabajo al compañero 
La cuestión es que tras la primera hora ya se apreciaba una posible continuidad en forma de rampa descendente, pero aún quedaba trabajo para poder meter al menos la cabeza, la constancia nos dio el resultado tras otra hora más, pudiendo comprobar que efectivamente existía una cavidad ahí abajo aunque fuese de pequeñas dimensiones, ahora solo faltaba facilitar mejor la entrada y la salida una vez coláramos dentro.

Tras el trabajo, Rafa fue el primero en meter los pies empujando parte del sedimento hacia dentro y terminó colándose sin impedimento por la rampa de un metro y medio aprox. pero eso si la entrada es en forma de gatera... Tras unos segundos de silencio, su voz nos entusiasmaba,   -¡¡¡Chavales, Aquí se puede echar un partido de Tenis!!!-, en seguida nos animamos a entrar aunque las únicas raquetas que metiésemos fuesen un par de paletines y la entrada fuera algo angosta... Después de varios años, Paco y Javier iban a volver a pisar suelo virgen en Tamajón.

Gatera de entrada poco antes de entrar


Dentro podíamos ponernos de pie, que alegría aunque no sé que tal quedaría una mesa de pin pon..., nos encontramos con una salita de unos 8 metros cuadrados de paredes angulosas y muchas aristas con formaciones secas y el suelo empedrado, todo muy fosilizado. Tras revisar bien las posibles continuidades y después de aupar a Rafa para llegar a valorar una chimenea sin continuidad, Rafa se metió por la única gatera horizontal por la que parecía tener buena continuidad y donde podríamos coger forzando un poco limpiando el suelo arenoso.
                                                                     Rafa abriendo camino
                                                                             Laminador ajustado
 Con la ayuda del paletín se abrió paso tumbado completamente con el apoyo moral de Jesús que a la vez también limpiaba el suelo de piedras y algún que otro hueso seguramente de vaca. Era un laminador con varias curvas, de muy poca altura con el techo liso con una fina capa en forma de falso suelo en algunos metros, por lo que había que ajustarse mucho al suelo para no tocar el techo aunque fuese muy ajustado…, tras recorrer unos diez metros, logramos acceder a otra sala mucho más grande que la anterior, más confortable y con bellas formaciones, (…en ésta habría espacio suficiente para jugar al pin pon incluso por parejas).
                                                        Algunas formaciones de la segunda sala
 
Javier se animó a pasar detrás mientras Paco decidió salir fuera para recoger un poco la herramienta y proteger las chaquetas por si lloviese. En medio de la nueva sala y bajo un bloque encontramos una rampa en principio casi impenetrable, en la que dejamos rodar algunas piedras para valorar la profundidad y… estupendo, el sonido del final nos gustó porque nos daba la pista de que tras el tobogán podía haber una galería o sala grande.
                                                            Rampa en principio impenetrable

Tras ayudar a Javier a lograr atravesar el laminador y valorar entre los tres, pensamos que había que romper las aristas de la entrada de la nueva rampa para poder bajar, ya que dentro ensanchaba pero como solo teníamos dos paletines, Jesús salió de la cueva en busca de la llave maestra de cavidades que dejamos fuera en el llavero (…la barra de hierro) y avisó a Paco del nuevo hallazgo.
                                                                Jesús saliendo del laminador



De nuevo para dentro, hubo que rebajar más el suelo del laminador para facilitar el paso a Paco, la verdad que terminó siendo un laminador divertido pero que merecía la pena cruzar. Después de lograr romper algunas aristas del paso a la rampa, Rafa que había sido el punta del grupo decidió intentar forzar el paso y bajar con mucha delicadeza ya que no sabíamos lo que le esperaba ahí abajo, en cuanto observó que no tenía peligro se dejó caer por el tobogán arenoso de unos cuatro metros y nos entusiasmó como al principio una voz lejana… tan solo dijo - ¡¡ Tenéis que ver esto !!-
                                                          Rafa forzando la entrada a la rampa
 Arriba en el bloque pensamos que ya podía merecer la pena porque nos iba a costar un poco el destrepe entre aristas después de ensancharlo aún más, pero había que intentarlo, Jesús bajó con cierta facilidad al igual que Rafa, pero los veteranos debían seguir un poco más despuntando los bordes y peleándose con un trozo suelto del bloque hasta lograr colar al piso inferior,
                                                              Entrada a la rampa desde abajo
 
parecía un poco incómodo pero al final les resultó fácil la bajada además de enriquecedor al contemplar la sala final de la cueva, repleta de bellas formaciones de todo tipo, blancas y transparentes en periodo de formación, algunas excéntricas!!… incluso gours activos uno de ellos en forma de pileta que seguramente dé nombre a la nueva cavidad, todo un descubrimiento para lo que suele verse en Tamajón.





Después de fotografiar y pasada la hora estimada para comer, salimos con el deber cumplido.
                                                       Paco pasando el divertido laminador
                                                               Javi feliz por el deber cumplido
LA TARDE
Tras la comida y sobremesa, nos quedamos solos los Molareños, pensamos en visitar Los Enebrales, cueva cercana a Tamajón y donde el pasado año 2013 miembros de nuestro club, Manuel Fdez. y un servidor, descubrimos nuevas galerías y salas de grandes dimensiones tras desobstruir y ensanchar una ventana a base de maza y cincel. Como desde entonces no se había vuelto a visitar y aún falta publicar la Topo, decidimos pasar la tarde allí valorando trabajos y ensuciando un poco el mono. La cueva tenía mucho más barro de lo normal por las aguas caídas en días anteriores, por lo que nos fue divertido subir la rampa hasta acceder a la ventana que da acceso a la zona nueva. Tras el destrepe de unos dos metros para acceder a la primera sala, a la que Manu ya tiene un nombre preparado para cuando publiquemos la topografía completa, encontramos un montón de piedras para facilitar llegar hasta la ventana desde dentro, primera prueba de que en medio año del descubrimiento alguien ha logrado ya contemplar esta galería, un gran entusiasmo para nosotros poder compartir tan pronto este reciente hallazgo…
                                                                                Ventana trabajada
Menos orgulloso me sentí cuando al final de la sala y al principio de la galería principal, observamos bien visible Una Pintada!!!, para colmo de Spray!!!, en azul y aparentemente realizada con la ayuda de un molde, SALA YANGUAS. No sabemos a quién es debido este nombre ni el autor, pero desde aquí manifiesto en nombre de Abismo nuestra gran desconformidad con esta gamberrada y nuestra desilusión tras las horas de trabajo, las cuales sin ningún tipo de interés ni protagonismo, dan un fruto simplemente para la libre contemplación de la belleza de las cavidades, las cual ya sufre por la propia visita y a la que hemos de proteger tomando medidas de cierre en algunos casos si fuese necesario, así que se aplique el cuento quien se dé por aludido y protejamos entre todos el futuro legado.


Jesús Fernández Nieto

Comentarios

  1. Enhorabuena por el descubrimiento de Tamajón. Ya se sabe el que sigue y la persigue la consigue ;-)
    Lamentable lo de Enebrales. Luego nos quejamos de que cierran cuevas pero en ocasiones dan ganas de cerrarlas para siempre.

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  2. Bueno, compañeros... habrá que volver a topografiar, ¿no?. El laminador ese ¿no se habrá rebajado, verdad?. Fue divertido y sudamos un rato... Hay que seguir con la zona, que ya quedan poquitas incógnitas...
    Javier

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  3. ENHORABUENA!!!!!!!!!!!!!

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