Agosto 2022: Más prospecciones en la zona

 Zona de Abismo en el Alto Tajo: Agosto de 2022, más prospecciones en trocitos pendientes

Pasa el tiempo, crece mi agenda de pendientes y veo que, o me pongo con ellos, o eso, se quedarán pendientes para siempre.

La Sima del Camponcillo, una de las de esta parte

Entre las cosillas de la lista, algunas actividades a difundir en este blog, y como tienen fecha, mejor dejarlas caer aquí antes que después, aunque sean pequeñas actividades sin relevancia.

El pasado mes de agosto pude acercarme a la zona un par de veces, dos salidas de medio día aprovechando que no estaba lejos de la zona.

El plan, pues el habitual cuando no voy acompañado, elegir unos trocitos de esos que no le gustan a nadie, porque no tienen pinta de que haya ninguna cavidad, y prospectarlos detalladamente, y mientras, pues me voy fijando en los hierbajos, bichos y cantos diversos, que también tienen su interés.

El objetivo, avanzar todo lo posible en el sector G, que es el extremo sureste de la zona de Abismo, es decir, lo más cercano al cruce de las carreteras a Zaorejas y a Peñalén. Hablamos de los "famosos" subsectores Corrales del Pollo, Camino del Vado Salmerón y Puntal del Cerro Oeste.

Este es el sector G con sus subsectores

Diré, por dar algún detalle, que en todo ese territorio que viene a ser como 3 km2,  sólo son conocidas tres cavidades:

La Sima del Camponcillo, muy interesante por su desarrollo, las dificultades que ofreció su exploración y estudio, lo controvertido de su nomenclatura por diversas confusiones a la hora de asignarle su verdadero nombre en el pasado, y su historia (espeleológicamente hablando), pues ya el grupo catalán S.I.E (Sección de Investigaciones Espeleológicas del Centro Excursionista Águila de las Corts) la exploraría a finales de los 60, y es posible que exista de entonces una topografía (con ella serían cuatro, y hay algún croquis adicional), aunque no fue posible conseguirla.

También Abismo estuvo allí ya en 1992, dejando este croquis provisional:

Decir también que, quizá por lo imponente de su pozo de entrada, ha sido tradicionalmente considerada por las gentes de Villanueva como una de las simas más profundas, e incluso "sin fondo", tal y como María Luisa Martínez comenta en su obra sobre Villanueva, titulada "La calle angosta": 

"En la sima el Camponcillo nadie se ha atrevido a hacer experimentos, todos decían que no tenía suelo, que por más sogas que empalmaran no llegarían al fondo, que el agujero se prolongaba indefinidamente hasta el centro de la tierra o hasta las antípodas".

La Sima del Puntal, otra clásica citada en el catálogo provincial para la que no había topografía (creemos) hasta que la documentamos Luis Valero y yo en 2018. 


Y finalmente, la Sima del Majal Balagoso, una sima nueva para el territorio a la que nos condujo Óscar, un amigo de Villanueva que no para de estudiar su tierra. Esta última la hemos explorado y documentado recientemente y ya ha publicado la correspondiente crónica nuestro coordinador de zona, Toño Herreras.


 Cabe decir que hubo una sima más, según el mismo amigo, que llamaron Sima del Corral del Tío Mamerto, y de la se conoce su localización muy aproximada, pero que fue tapada, posiblemente con grandes bloques, durante las obras de acondicionamiento del terreno para favorecer el crecimiento y expansión del pinar (subsolado con maquinaria pesada, de ahí esas extensiones de enormes pedruscos vueltos que hacen un suplicio la prospección).

Terreno subsolado de esta parte

Apunto una breve reflexión al respecto. Las cavidades no son deseadas ni especialmente apreciadas por las gentes del lugar, sino consideradas un peligro y un problema. No es nada raro que, de ser posible, sean cegadas, taponadas, tapadas. Por eso es importante, cuando sea posible, que dejmos las bocas cerradas con troncos, arbustos, etc., como muchas veces las encontramos al llegar.

Esto lo venimos haciendo tradicionalmente, precisamente para evitar ese riesgo potencial de accidente de algún despistado, o algún animal, sea doméstico o ganadero, y de paso, para evitar así que las gentes del lugar nos consideren causantes del posible daño.

Y no hay más en todo lo prospectado, y lo hemos hecho sistemática y detalladamente. Sólo hemos encontrado algún hundimiento, pequeñas torcas, varias "posis", y nada más. Del kilómetro cuadrado queda por prospectar entre un cuarto y un sexto, y lo más probable es que no encontremos nada, me temo.


Y bueno, ahí que fuimos a ver si entre lo que queda de año y el que viene, podemos dejar acabada esta parte.

Como sería muy tedioso un trabajo continuado durante todo el rato, la idea es elegir una cuadrícula y barrerla, para saltar a otra parte del territorio y volver a hacer lo mismo... así es como si fuéramos mordiendo una galleta en varios sitios, pero al final cae la galleta entera.

Durante estos dos ratos le daríamos unos cuantos mordisquitos al área pendiente, acabando aproximadamente con unas 15 ha.


Más o menos los cachitos que hemos estado mirando

El resultado, pues el esperado, ninguna cavidad. Sólo algún indicio, áreas con algúnas líneas de fractura que se aprecian en superficie (pequeños hundimientos), litosuelos puntuales... pero nada más.

Pero, en fin, creo que podré acabar ese territorio en otras cuatro salidas, quizá tres, y entonces quizá nos pongamos con otro tema pendiente y más ambicioso. Pero ya os contaré cuando llegue el momento.

Javier Rejos

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

Cambiamos el día de apertura de nuestro local al JUEVES!!

Os comunicamos que, a partir del 13 de febrero, nuestro local pasará a abrirse los jueves de 20:30 a 21:30 , en lugar de los martes como ve...