Subía la
cuesta de aproximación con sentimientos de respeto y de cariño, es una cavidad
que a mí me encanta, pero al mismo tiempo no deja de ser
bastante laberíntica, o más bien digamos en la que no te puedes permitir
el más mínimo despiste.
No hubo ninguna
desorientación digna de mención, alguna pequeña duda en un par de puntos que te
hacen tirar de topo, pero nada destacable. Tres horas para llegar al rio
Rubicera, más otra para ver la sala de la teta, los pelos y comer algo por el
camino, y otras dos horas y pico para desandar el camino.
Hacer
mención tan sólo a dos cosillas, la cuerda del P.31, aunque estaba mal
peinada y al rehacer el nudo crujió un par de veces cuando bajábamos, está
en fijo y en bastante buen estado.
Y dos, chapó
a la última incorporación de compañeros, sois una verdadera máquina, ojalá os
termine de enganchar esta actividad tanto como a mí, es realmente un placer teneros
cerca.
Isma Luengo
Prepárate a llevar a unos cuantos más en años venideros. Bravo por el grupo y su único guía Isma, que funcionasteis a la perfección....
ResponderEliminarPacoQ
Con la gente que llevaba ha sido muy fácil, en la red hay mucha información y se habían empapado hasta la saciedad, ahora mismo hay mucho personal en el Club que promete de veras, ánimo para todos ellos, y que sigamos aprendiendo de los que llevais tantos años en esta actividad.
ResponderEliminarIsmael.